Por Marcela Barillas
Una relación sana con la comida implica tener un equilibrio entre las elecciones alimentarias, la cantidad de comida y las emociones asociadas a la alimentación. Significa disfrutar de los alimentos sin sentir culpa o remordimiento, y comprender que todos los alimentos pueden tener su lugar en una dieta equilibrada.
Tener una relación sana con la comida implica también escuchar y respetar las señales del hambre y la saciedad, así como reconocer y satisfacer las necesidades emocionales sin recurrir a la comida. Es importante recordar que cada persona tiene una relación única con la comida y que lo más importante es encontrar el equilibrio y la paz con la alimentación.
Existen diferentes señales que pueden indicar una relación poco saludable con la comida. Una de ellas es la obsesión por contar calorías y llevar un registro constante de la cantidad de alimentos que se consumen. Además, sentir culpa o vergüenza después de comer, así como tener un control extremo sobre los alimentos y evitar ciertos grupos alimenticios, también son señales de una relación poco saludable con la comida.
Otro indicador es sentir una gran preocupación por la apariencia física y tener una imagen distorsionada del propio cuerpo. Experimentar cambios bruscos de peso, comer en secreto o de manera compulsiva, y tener una relación emocionalmente dependiente con la comida también son señales de una relación poco saludable. Si reconoces alguna de estas señales en tu vida, es importante buscar ayuda y trabajar en desarrollar una relación más equilibrada y saludable con la comida.
Desarrollar una relación sana con la comida es fundamental para mantener una buena salud y disfrutar de una vida equilibrada. Para lograrlo, es importante adoptar hábitos alimentarios saludables. Primero, debemos aprender a escuchar a nuestro cuerpo y respetar sus señales de hambre y saciedad. Esto implica comer cuando realmente tenemos hambre y parar de comer cuando estamos satisfechos.
Además, es esencial dejar de lado las restricciones y los alimentos prohibidos, ya que esto puede crear una relación poco saludable con la comida. En lugar de eso, debemos permitirnos disfrutar de todos los alimentos en moderación. También es útil planificar las comidas con anticipación, eligiendo opciones saludables y sabrosas. Incorporar una variedad de alimentos nutricionalmente equilibrados en nuestra dieta diaria es clave para obtener los nutrientes necesarios.
Por último, es importante cultivar una actitud positiva hacia la comida, disfrutando de cada bocado sin sentir culpa o remordimiento. Al seguir estos consejos, estaremos en el camino para desarrollar una relación sana con la comida.
Fuente: Esto es azúcar